Había una vez 27

Había una vez un gato dentro de una caja cerrada junto a un dispositivo con una ampolla de gas venenoso que en caso de romperse es letal. El gato estaba a la vez vivo y muerto, la única manera de saber su estado es abrir la caja. Según reclamos de las asociaciones de derechos de los animales, se ha cambiado el ejemplo por el de una botella con leche que en caso de romperse alimentaría al gato. En ese caso el gato estaría alimentado o hambriento al mismo tiempo. El gato responde al nombre Schrödinger.